A mediados de marzo, Labo ya se había puesto en modo operativo. La reacción anticipada, mirando lo que estaba ocurriendo en Europa y Asia con el coronavirus, les permitió mantenerse durante los meses críticos de la pandemia y consolidar una operación híbrida para lo que resta de incertidumbre.
“Es un hecho que la operación de Labo es híbrida, ampliamente remota. La presencia es mínima, indispensable o necesaria para algunas acciones o ejecuciones que se lleven a cabo en las instalaciones” explica Charles Barthe, CEO de la compañía de doblaje y posproducción.
El inicio temprano de la operación remota, la reunión contaste con los equipos para resolver los desafíos técnicos para la Session Link fue la mejor opción tecnológica, e identificar y armar un pool de talentos con capacidades de grabación fueron las tres claves para seguir en pie. “Esto nos permitió llegar a una transparencia absoluta en el servicio y las entregas de cara a los clientes”.
Al menos 18 proyectos hicieron durante la cuarentena, entre los que se cuentan Wizard, de Dreamworks, y varios de audios descripciones de Netflix como Crónicas del Taco, Nailed it, Was network y la película de Lionsgate Mientras estés conmigo.
“En cuando a la operación de posproducción fue bastante sencilla plantearla a remoto y lograr un buen equilibrio entre híbridos. Es decir, las operaciones que se tienen que hacer en los equipos aquí presentes y todas las operaciones que se tienen que hacer de manera remota”.