Para Ignacio Vidaguren, CEO de IMS, hay rasgos de
la nueva normalidad que se divisan como duraderos. Explica que en la
publicidad digital el principal desafío de las marcas es saber aprovechar la
hiperconectividad de una audiencia cada vez más exigente. “La oportunidad viene
de la mano de la espontaneidad y, en ese sentido, el gaming es
una alternativa posible” destaca.
“Las plataformas digitales son un terreno de
oportunidades para conocer los gustos de los consumidores, y así construir
lazos realmente fuertes” dijo. No obstante, esto solo resultará si se comprende
dónde está el corazón de la conectividad, y el gaming, que creció
un 25% durante la cuarentena, se visualiza como espacio clave en el universo
publicitario tras la pandemia.
Explica que, en ese sentido, hay un triple valor
que es importante tener en cuenta a la hora de enfocar el marketing en esta
actividad: interactividad, recepción y recompensa.
Los videojuegos brindan la posibilidad a
aquellas marcas que apuestan por un vínculo con estas plataformas, de construir
contenido a medida de los gustos de los usuarios. Posibilitan, además, una
amplia gama de opciones a la hora de darse a conocer sin interrumpir la
experiencia de consumo.
Casi tres de cada cuatro jugadores están abiertos
a ver marcas que patrocinen los juegos. “La recompensa que obtiene el jugador
al interactuar con las marcas es tan valiosa, que ha cambiado la percepción del
lugar que ocupa la publicidad en los videojuegos hoy en día. Desde esports hasta móvil, la audiencia gamer se compenetra con la experiencia y
esto permite a las marcas tener una llegada más genuina” enfatiza.