Érica Sánchez, productora ejecutiva de Monarca 2, comentó que muchos de los upgrades que se observan en esta segunda temporada partieron de la evaluación que hicieron con Salma Hayek y el equipo de Ventanarosa,
Pepe Támez, productor ejecutivo, Michael McDonald, de Stearns Castle, y la gente de Netflix, Roberto Stopello.
Sánchez afirma que los valores de producción que lograron se deben, fundamentalmente, al equipo, en el que sumaron talentos, como el de Mariana Chavira en vestuario, “quien ha trabajado en otras series con Lemon Studios y tiene muy buen gusto”. Recordó que Fer Rovzar trajo a Raúl Álvarez, consultor de imagen, quien a su vez incorporó a Alexia Uribarri para el desfile de moda. “Queríamos que se viera más nice, más upstyle”.
También se integraron Florent Vitse, diseñador de producción; Carlos Sánchez, diseñador de imagen; Daniel Jacobs, director de fotografía; Jorge Ramírez, line producer. “El cambio ocurrió porque quienes trabajaron en la primera temporada estaban ocupados para la segunda, pero al cambiar, buscamos los mejores perfiles” explica.
Además, la segunda temporada de Monarca se grabó en parte en pandemia. Y aunque parar en medio de la producción es un revés, Lemon Studios supo enfrentarse al reto, construyendo sus propios protocolos cuando poco se conocía del tema y grabando con todo el equipo en cuarentena, guardados en un hotel. Fueron pioneros en el tema. Sánchez afirma que al enfrentar retos como cambiar de locación (haciendas en Querétaro en lugar de en Jalisco) y construir sets en el hotel, consiguieron una sinergia de equipo inusual, con lo que se logró el gran trabajo que hicieron.