El quiebre que produjo la pandemia en 2020 ha condicionado también el año que apenas está comenzando. Pese a lo complicado del panorama, con los cambios en el mercado, la programación y el consumo empiezan a aparecer nuevas oportunidades para algunos sectores de la industria.
“Las crisis son la base perfecta para reinventarse, modificar y mejorar en la operación del estudio, de los sistemas y lo más importante: el servicio ad-hoc a las necesidades cambiantes de nuestros clientes” comenta Jorge Arregui, CEO de Dubbing House.
La dobladora, que el año pasado obtuvo sus certificaciones de seguridad y calidad que exigen los grandes players de la industria, ve oportunidades en este año que también vislumbra “complicado para la industria del entretenimiento en general a nivel mundial, no solo de los espectáculos en vivo, en la exhibición cinematográfica, sino también en la producción de películas y, desde luego, en la industria del audio y del doblaje”.
“Hay una nueva ventana de oportunidad que se abre con la remasterización de películas de los grandes catálogos que existen en las productoras de cine alrededor del mundo” apunta. Además de esto, este año deberán hacerse inversiones en equipos técnicos y en la capacitación del personal de grabación y mezcla para poder conseguir excelentes grabaciones y regrabaciones (mix) en la modalidad remota que ya adoptaron la mayor parte de las compañías de doblaje.