Televisa seguirá siendo propietaria de Izzi Telecom, Sky y otras empresas, además de los principales inmuebles asociados con las instalaciones de producción, licencias de difusión e infraestructura de trasmisión en México. La producción del contenido noticioso para México se subcontratará de una empresa propiedad de la familia Azcárraga para garantizar que este continúe en manos mexicanas y se produzca en México. Televisa-Univisión retendrá todos los activos, la propiedad intelectual y la videoteca relacionada a la división de Noticias de Televisa
Después de la transacción, Televisa continuará el desarrollo y la expansión de sus actividades de telecomunicaciones en México. Televisa usará los ingresos que reciba de Univisión principalmente para reducir deudas y continuará buscando oportunidades de crecimiento y reforzando su posición de líder por medio de inversiones continuas en sus actividades principales. Como resultado, la tasa neta de endeudamiento de Televisa disminuirá a menos de 2.0x y sus activos y pasivos en dólares estadounidenses serán equivalentes. Después del cierre de la operación, Televisa dejará de consolidar los resultados de su segmento de Contenido.
Durante el período de transacción la producción de contenido y las operaciones en México seguirán a cargo de Emilio Azcárraga, presidente ejecutivo del Consejo de Administración de Televisa, y de Bernardo Gómez y Alfonso de Angoitia, copresidentes ejecutivos de Televisa, para asegurar una integración fluida y exitosa.
Se tiene previsto que la operación se complete en 2021, sujeto a las usuales condiciones de cierre, lo que incluye recibir aprobación de entidades normativas en EE UU y México, y de los accionistas de Televisa. La junta directiva de Televisa y la de Univisión ya han aprobado la combinación.