Vintage Glass, con Georgina Terán, CEO y presidenta de EFD, y el director de fotografía Serguei Saldívar a la cabeza, ofrece a la industria mexicana la posibilidad de acceder a una importante colección de lentes vintage y así enriquecer las posibilidades creativas en la producción de contenidos. Esta nueva área de servicio será presentada como parte de EFD Group, el próximo 12 de noviembre.
En esta alianza, Saldívar, cinefotógrafo que lleva años estudiando ópticas y armando colecciones, aporta su conocimiento y Georgina Terán además de los recursos para la compra y rehousing de los lentes, su experiencia en cuanto a equipos y tecnología. Saldívar, además, es un apasionado del tema, lo que garantiza que pondrá su energía en lograr la mejor colección de lentes para la industria.
Saldívar explicó que la idea es tomar lentes analógicos de foto fija, en su mayoría, algunos de cine, para adaptarlos a las cámaras actuales digitales. Para ello hay que adaptarlos, arreglar sus sistemas mecánicos, colocarles una montura positive block —estándar para el cine—, y anillos que permiten mover el foco con el sistema de engranajes del cine.
“Es una inversión que implica tiempo y largas pláticas con las empresas que adaptan estos lentes a las cámaras de cine, en el que se estudia cada caso y se decide si hay que pagar el desarrollo. Implica tiempo, en algunos casos hasta dos años para hacer la adaptación del lente, además de dinero” dijo, tras comentar que el reto es completar toda la colección de cada marca. “Estoy trabajando para tener las colecciones más completas, con los 14 lentes de cada colección, y así tener los pasos de un focal a otro” explicó, tras comentar que, para conseguir los lentes, los busca en subastas o tiendas de cámaras usadas.
En este momento usar lentes vintage en México no resulta accesible, porque hay pocas colecciones. Traerlas de Los Ángeles o de otro país eleva el presupuesto, pero Vintage Glass plantea establecer precios competitivos, pues la idea es que la decisión de usar este tipo de óptica sea creativa, y no esté limitada al presupuesto.
Saldívar comentó que, al contar con distintas familias de marcas de lentes vintage, los cinefotógrafos cuentan con la posibilidad creativa de usar texturas que las cámaras digitales no ofrecen. En el pasado, los fotógrafos trabajaban artesanalmente forzando el revelado, subexponiendo el material, reteniendo plata al negativo, o usando distintos tipos de emulsión del negativo. “Tenías muchas posibilidades de combinaciones, junto a las ópticas y filtros, para jugar con texturas. Ahora los fotógrafos nos enfrentamos al mismo sensor y si quieres influir en el look de la película, es con las ópticas” explicó.
Todas las colecciones de lentes van a tener su lente macro, con el objetivo de cubrir con el mismo look todas las necesidades de un cinefotógrafo. Saldívar tiene la ventaja de ser director de fotografía, por lo que piensa como tal. “Por ello agradecería tener todas las focales de una misma marca, así como todos los zooms o lentes macros de esa marca, es decir, la familia completa” dijo.
Actualmente cuentan con un juego de Baltar, que son lentes muy especiales, que fueron usados por Orson Wells y Alfred Hitchcock en algunas de sus películas, y a mediados de noviembre tendrán disposición los lentes Mamiya. “En el curso del año van a empezar a llegar más colecciones, entre ellas Canon, Nikon, Canon reinfunders, Olympus y Leica, informó.