“Twitter ya no existe” según una presentación judicial del 4 de abril que salió a la luz el martes 11. Bajo la propiedad del CEO de Twitter, Elon Musk, la plataforma de microblogging se ha fusionado con la entidad corporativa de Musk, X Corp.
La fusión se reveló por primera vez en los documentos de un proceso judicial entre Twitter y la excandidata al Congreso Laura Loomer. Loomer demandó a la plataforma, alegando que violó las leyes federales contra el crimen organizado cuando prohibió su cuenta hace cuatro años.
Musk publicó un tuit en octubre que decía: “Comprar Twitter es un acelerador para crear X, la aplicación para todo”.
Además, Musk ya posee la “X.com” un banco online que fundó en 1999 y que se fusionó con otra empresa para convertirse en PayPal.
Dado el historial de Musk con los pagos digitales y su deseo de crear una “superaplicación” que combine mensajería, redes sociales y funciones de pago que recuerden a la popularísima aplicación china WeChat, este podría ser el primer paso del multimillonario en una empresa de mayor envergadura.
“En cualquier caso, podemos estar seguros de que la funcionalidad de Twitter, su base de usuarios y su enorme cantidad de datos desempeñarían un papel crucial para hacer realidad esta megaaplicación más rápidamente que si Musk hubiera empezado desde cero” escribió Forbes, que planteó posibles problemas de privacidad, citando una investigación de la Universidad de Duke que identificó a más del 57% de los proveedores de servicios de Twitter como intermediarios de datos.
Al menos por ahora, el cambio de nombre corporativo no afecta al estatus de Twitter como plataforma de medios sociales.