Flow de Argentina vuelve a apostar a la producción original que tan buen resultado le ha
generado: la mayoría de sus estrenos locales son los más vistos de la
plataforma. Por ese motivo estrena, este jueves 4, la comedia Gamer, una
coproducción con Planta Alta, el Ministerio de Cultura de la Nación y
la Secretaría de Medios y Comunicación Pública.
Es dirigida por Jonathan Barg y cuenta con la
producción general de Leandro Vital. Barg, Javier Zevallos y Pablo Pérez son
los guionistas, y Barg, Vital y Andrés Sehunkman son los creadores de la
serie.
Es protagonizada por Nicolás García Hume, Charo López, Rocío
Hernández, Yamila Ostrower, Franciso Bereny y la
participación especial de Martín Slipak.
Es una comedia de ocho episodios que cuenta el choque generacional entre Oscar (García Hume), una exleyenda de los
videojuegos, que está atravesando una crisis existencial y los Warriors, su
nuevo equipo de gaming formado por chicos que podrían ser sus hijos.
Federico Canónigo, gerente de Programación y
Contenidos de Flow, dijo a PRODU, que siempre están a la búsqueda de contenidos que sean distintos y para un segmento amplio y no solo
focalizado en un target específico y Gamer está precisamente en esa línea porque se tocan temas como el
gaming, el amor y las relaciones entre padres e hijos. Y eso fue lo que les
atrajo del proyecto.
“Gamer es
una apuesta nueva dentro de nuestra oferta y creo que todos se pueden sentir
identificados: los más grandes, los jóvenes y además es muy ágil y divertida”
señaló al tiempo que comentó que es una historia universal y por eso cree que
puede ser adquirida por cualquier otra plataforma o canal una vez que pase la
exclusividad con Flow.
El dinero
recaudado por la comercialización se reinvierte para otras producciones. Adelantó
que este año están preparando otras cuatro series como la ya anunciada Frágiles, con StoryLab, y otras tres que todavía no puede adelantar.
Informó que Flow es la segunda plataforma en cantidad de abonados detrás
de Netflix y que tienen un perfil completamente distinto porque son
producciones más locales, de muy buena factura, pero presupuestos más bajos.