Francisco Ramos y Mónica Lozano junto a Alexis Fridman, Sandra Solares y Rafael Ley
Ser productores responsables y conocer el mercado, crecer en capacidades empresariales y creativas, ser rigurosos en el cumplimiento de las leyes, sobre todo en cuanto a derechos de autor y condiciones laborales y construir un entorno que permita y favorezca las distintas miradas creativas, además de garantizar la formación de más creadores y técnicos, son algunos de los retos que enfrenta el mercado mexicano.
Esta reflexión tuvo lugar durante el evento Que México se vea, en el panel Las oportunidades del panorama de producción en México, bajo la moderación de Francisco Ramos, VP de Contenido de Netflix en Latinoamérica, y participación de los productores Mónica Lozano, Sandra Solares, Alexis Fridman y Rafael Ley.
Mónica Lozano, fundadora de Alebrije Producciones, y actualmente produciendo Nadie nos vio partir para Netflix, comentó que México vive un momento de cambio en el que el país, con su enorme potencial, creatividad y comunidad de profesionales y artistas, se tiene que atrever a la innovación, a la diversidad y a la pluralidad de contenidos. “Hay que apoyar a la producción independiente, ayudar a desarrollar sus capacidades empresariales y creativas. Tenemos que desarrollar mecanismos e instrumentos que cobijen esta actividad, tanto en el ámbito del fomento, del estímulo, y de las inversiones públicas y privadas” dijo, tras comentar que espera que los gobiernos entiendan que el audiovisual es un espacio de soberanía nacional y de marca país, es un vehículo de educación y comunicación muy relevante, por lo que hay que desarrollar políticas públicas que combinen lo privado y lo público”.
En su lista de retos, nombró la necesidad de formar cuadros, profesionalizar a la industria y lograr la certificación de los distintos oficios. “Hay que trabajar mucho en el desarrollo de proyectos y en que las historias, aunque sean universales, no pierdan nuestro ADN, nuestra identidad: venimos de pasteurizar y descafeinar nuestras historias y tenemos que apostar por la originalidad” explicó.
Por su parte Alexis Fridman, fundador de Perro Azul, actualmente produciendo El secreto del río, comentó que es muy importante que las productoras sean responsables al crecer, tras recordar el momento de explosión en la producción que se vivió en 2022. “Hay que conocer el mercado y entender que hay que apostar por más semanas de rodaje en lugar de sueldos más altos. Tenemos que darnos el tiempo a desarrollar proyectos, empezar a escoger mejor, y tener muy claro el tipo de crecimiento que tenemos que tener como industria para evitar el descontrol, que ya vivimos en años anteriores. Siento que ahora nos estamos nivelando” dijo.
Para Sandra Solares, productora de Las muertas para Netflix, es muy importante no repetir fórmulas, sino arriesgarse por proyectos innovadores. “Hay que acompañar a los distintos creadores desde un lugar muy respetuoso, para poder tener las visiones de cada uno y seguirlas en su contexto correcto, que tengan presupuestos adecuados, tiempos adecuados, y una línea que nos lleve a ser auténticos y a contar historias auténticas, sobre todo ahora, que es cuando lo necesitamos más” dijo.
Mónica Lozano apostó por trabajar en las producciones bajo el esquema de “espejos” donde se permita que haya personas aprendiendo junto a un guía que lo va orientando en todo el proceso. “Hay que implementar laboratorios donde participen los equipos de los proyectos. Es importante trabajar en el desarrollo y planificación de los contenidos, en un trabajo más horizontal, que de por sí la producción audiovisual lo permite, pero hacerlo más eficaz. Hay que invertir más en esas etapas y eso se verá mejor aprovechado y optimizado con esos recursos en pantalla. Este trabajo de integración y crecimiento, a la par de los técnicos y artistas que se vinculan, puede ser muy útil para tener proyectos muy únicos y con mucha posibilidad” comentó.
Rafael Ley, de Woo Films, a cargo de Celda 211 para Netflix, destacó la importancia de apostar por las personas del crew en los proyectos, y escoger producciones en las que se puedan entregar responsabilidades a personas que están en formación. “Nos podemos llevar sorpresas, donde gente con poca experiencia tiene una gran mirada y nos recuerda que ya nosotros no somos la mirada fresca o creativa que creíamos” dijo.
