La agencia Dieste publicó en Provoque Weekly un trabajo donde intenta mostrar el problema de las primeras impresiones y de estereotipar a las personas. “Todos somos culpables de esto. Cada vez que conocemos a alguien, nos formamos una opinión de ellos” destacan. Pero advierten que frecuentemente no les damos tiempo a que se muestren como son y luego nos cuestionamos nuestro juicio inicial.
Para Dieste, cuando las personas son prejuzgadas o metidas en un nicho se pueden sentir confundidas, molestas, tristes o una combinación de todos estos sentimientos. Para mostrar su punto, la agencia hizo un video entrevistando a un grupo de sus empleados, haciéndoles tres preguntas: ¿Cuál es la forma más común en la que lo estereotipan? ¿Cómo lo hace sentir eso? ¿Qué le diría a la gente acerca de usted? Y ¿Se ha sentido estereotipado en el mundo de los negocios?
El resultado fue que la mayoría sufre por ser catalogada por su origen étnico, sexo, cómo se visten, entre otros, y que las personas asumen lo que no son sin realmente conocerlos.
Esta pequeña muestra se puede trasladar a la industria de la publicidad. Por eso, para Dieste, en el mercadeo multicultural es más importante que nunca conocer realmente a los clientes en vez de suponer estereotipos. “A través del uso de datos y análisis sociocultural, podemos entender mejor las necesidades de nuestros clientes, sus puntos débiles y comportamientos, de manera de construir relaciones más fuertes y estrategias comunicacionales más efectivas” concluyeron.