El decimosegundo informe de ThreUp, la plataforma de ropa de segunda mano, muestra algunas de las señales más prometedoras de cómo podría ser el futuro con mayores niveles de apoyo. Entre los resultados claves está que las prendas usadas son un fenómeno global. Se espera que ese mercado a nivel mundial alcance los 350 mil millones de dólares para 2028, y en EE UU llegue a los US$73 mil millones, esto representa un 11% de crecimiento anual.
Aunque el informe, realizado por GlobalData a partir de encuestas a 3.654 adultos estadounidenses el pasado mes de diciembre y a cincuenta marcas de moda en EE UU, recogió algunos datos relevantes de la tendencia global.
Sin embargo, falta mucho por hacer y el apoyo de todos los involucrados. “Hasta que la moda ya no sea uno de los sectores más dañinos de la economía global, continuaremos abogando para que los gobiernos ayuden a impulsar la adopción y el cambio de comportamiento en la moda” destaca James Reinhart, director ejecutivo de ThredUp.
El mercado de ropa de segunda mano sigue en alza en EE UU. En 2023 tuvo un incremento de 18% y para 2025 se espera que el 10% del mercado mundial de prendas de vestir esté compuesto por ropa usada.
El informe muestra que la reventa está impulsando el crecimiento del sector de segunda mano. En 2023, esta creció 15 veces más rápido que el sector minorista de ropa en general, y la reventa en línea experimentó un crecimiento acelerado del 23 % año tras año.
Los artículos de vestir de segunda mano constituyen una parte importante de los armarios de los consumidores, el informe muestra que dos de cada cinco prendas de vestir compradas en 2023 fueron de segunda mano. Mientras que la compra en línea de estas prendas sigue creciendo, alcanzando el 63% en 2023, 17 puntos más que en 2022.
Según el informe, la reventa prospera en un entorno de búsqueda de valor. El 60% de los consumidores dice que comprar ropa de segunda mano les ofrece el máximo rendimiento por su inversión. Otra de las razones por las que los consumidores revenden ropa es para ganar dinero extra, 69% de los que revendieron ropa en 2023 lo hicieron para ganar dinero extra, mientras el 49% utilizó el efectivo para pagar artículos esenciales como comida y facturas.
Las marcas se montan en el tren
Y las marcas aprovechan este impulso con un crecimiento de participación interanual del 31%. Según el reporte, 163 marcas cuentan ahora con tiendas de reventa, un incremento de 39 más entre 2022 y 2023. Los nuevos participantes incluyeron a J. Crew, American Eagle y Kate Spade, destaca el informe. Mientras tanto, 74% de los ejecutivos minoristas que actualmente no ofrecen reventa están considerando o planean hacerlo en el futuro, 5 puntos más que en 2022.
El informe destaca que los minoristas están aprovechando la reventa como puerta de entrada a nuevos compradores. El 38% de los consumidores dijeron que compran productos de segunda mano para poder comprar marcas de alta gama, lo que representa 11 puntos más que en 2022.
En cuanto al tema de sostenibilidad, el 87% de las marcas que ofrecen reventa dicen que lo hacen para avanzar en sus objetivos de sostenibilidad. Mientras el 67% dice que la reventa generará un flujo de ingresos significativo (>10% del total) para la empresa dentro de cinco años.
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