Para Pablo Batlle, socio fundador de Nómades, el buen momento de la creatividad latinoamericana en Cannes Lions ha sido un proceso evolutivo donde, desde la industria, se entendió la necesidad de atreverse a innovar.
“Hace muchos años Brasil en press y luego Argentina en Film nos abrieron las puertas a la región. Colombia, Perú, México, el mercado hispano de EE UU, Costa Rica, Chile, etc., también comenzaron a hacer una gran parte. Eso logró que se empiece a ver el trabajo latino con otros ojos. Eso es muy importante. Somos reconocidos con muchísimos leones y lo más importante, con el respeto de la industria. El desafío es mantener esa percepción” afirma.
Uno de los aspectos que ha motivado el crecimiento en la región ha sido su firma de conectar las marcas con causas sociales. Para Batlle, esto ya no es más una categoría, “hoy atraviesa todas las categorías”.
“Hace unos 15 años la categoría de bien público era de las más abucheadas en el palais. Nadie la quería. El 80% de las inscripciones eran sobre el hambre en Biafra o no bebas si manejas. Con una creatividad muy de golpe bajo. Al mismo tiempo, en el resto de las categorías del festival eran aplaudidas publicidades que cosificaban a la mujer, se burlaban de la homosexualidad. El mismo festival, distintas épocas. Por suerte, la sociedad publicitaria cambió, los briefs de los clientes cambiaron (en muchos casos el mismo cliente era el que pedía ese tipo de comunicación que ganaba leones), los creativos por suerte cambiamos. Cannes siempre fue un reflejo de lo bueno y lo malo que sucedía en la sociedad. Hoy, sin duda, estamos yendo por un muy buen camino” concluyó.