Sergio Briseño, VP de Planeación Estratégica de DDB México, presentó un estudio sobre las características y oportunidades de la generación Z. En ese sentido, recalcó un dato clave: en México hay 22 millones de habitantes que forman parte de esta generación (18 a 25 años), es decir, representan 17% de la población del país. De ese total, 9 millones trabajan.
En la investigación identificaron tres tendencias culturales: confianza distribuida, la cual Briseño explicó se trata en que confían más en sí mismas, más que en otras personas, gobiernos o marcas.
“Los centennials en México están rompiendo con figuras de confianza y autoridades clásicas del pasado” expresó.
En ese sentido, comentó que esta característica se liga a la segunda tendencia: polarización. “Las personas están adoptando posturas cada vez más extremas. Esa necesidad de contrastar y romper con lo establecido es muy radical, incluso entre ellos mismos. Pero, sin duda, son una generación ambivalente y muy contrastante con las visiones del pasado” apuntó.
La tercera tendencia la definieron desde la agencia como “adulniños”. “Es una generación que añora la infancia” resaltó. “La evolución a futuro de estas tendencias muestra que esta generación se mantendrá polarizada y añorando su infancia, pero es posible que recuperan la confianza en las instituciones. Si se analiza bien, muchas de estas instituciones las van a a manejar ellos”.
Asimismo, indicó que luego de este estudio los definieron como la primera generación nativa líquida. “Son modernos, pero a la vez conservadores. Buscan equilibrar los roles de género y tienen posturas firmes y líquidas al mismo tiempo” señaló.
Estas tres características arrojaron los siguientes resultados:
Son modernos, pero a la vez conservadores
- A pesar de ser conscientes sobre el uso del transporte público, al auto propio sigue siendo una aspiración.
- Casi la mitad de los centennials considera mejor la educación online, sin embargo, para la mayoría, la educación tradicional en una universidad sigue siendo fundamental.
- En lo laboral, se sienten más cómodos con la seguridad y estabilidad de un sistema tradicional, restándole protagonismo al trabajo remoto.
- Cuando se trata de temas de dinero son racionales, precavidos y piensan a futuro.
Buscan equilibrar los roles de género
- En el caso de los hombres hay una evolución importante en cuanto a alejarse de los estereotipos tradicionales del hombre que predominaban en otras generaciones. Los hombres parecieran adoptar el rol que por tradición se le ha asignado a la mujer (quieren casarse y tener hijos).
- La mujer está evidenciando el momento de libertad e independencia que ha ganado. Es muy marcado el nivel de apertura y libertad que han alcanzado en esta generación sobre otras.
- Los hombres adoptan preocupaciones que solían ser parte del estereotipo de las mujeres en otras generaciones (salud y alimentación).
Posturas firmes y líquidas al mismo tiempo
- 76% de los centennials juega regularmente videojuegos, eso nos muestra que el gaming ha dejado de ser solo un hobbie para ellos.
- Son nativos digitales, pero siguen prefiriendo el mundo físico para la interacción social.
- En cuanto a redes sociales, TikTok ya se posiciona en un segundo lugar en cuanto a las que más utilizan (después de Facebook).
- A pesar de su ADN de autenticidad, parecieran estar conscientes de que se necesita guardar una imagen.
- A pesar de que les preocupa el medio ambiente, aún no incide contundentemente en su decisión de compra. Probablemente porque no ven acciones concretas de las marcas.
Tras este contexto, indicó que las marcas deben entender cinco oportunidades. En primer lugar, que se trata de una generación que no “ve negros o blancos, sino que siempre se mueve en escala de grises; siempre abiertos a la posibilidad de cambiar”. Seguidamente, también apuntó que hay que “respensar los journeys de comunicación, compra y consumo a partir de estos nuevos roles de género donde la mujer hoy es mucho más independiente y extrovertida, y el hombre se ha vuelto más tradicional e introvertido” acotó.
A ello agregó que las mujeres están experimentando un momento de empoderamiento y apertura, por lo cual es fundamental que las marcas comprendan sus nuevas aspiraciones y motivaciones para conectar relevantemente con ellas.
Por último, señaló que se debe tener un equilibrio entre lo físico y virtual, y que se debe ser conscientes de que están esperando posturas mucho más tangibles y comprometidas de las marcas. “Están esperando ver acciones, eso es lo que realmente va a incidir en su decisión de compra” concluyó.