Samuel Ríos y Valles, de Ciudad de México, es diseñador gráfico e inició su carrera en publicidad dirgiendo cientos de comerciales para marcas como Canon, Ford, AT&T, USPS, Bimbo, Coca Cola y Diageo entre otras.
Estudió dirección de actores en Los Ángeles con Judith Weston, Herramientas de Comedia con Steve Kaplan, Escritura de guión con Guillermo Arriaga, Marcela Fuentes Berain y Beatriz Novaro.,Técnicas de Dirección Meisner con Alberto Zeni. Improvisación con Omar Argentino. Producción con Tita Lombardo. Producción Teatral con Sebastian Sánchez, Tecnicas de ensayo y análisis de script en Two lights Studio en L.A. con JW.
Por su parte, Escribió, dirigió y produjo los cortometrajes “No Me Mandes a Mi” y “Los Detalles Olvidados”. Recientemente estrenó en México su opera prima “Los Días Que No Estuve”, la cual fue Selección oficial del Festival Internacional de Cine de Mallorca 2021. Es co-fundador de Mastodonte Films.
1. ¿Qué te inspira y qué buscas al momento de narrar una historia?
Definitivamente siempre busco la emoción, puede ser risa, nostalgia, miedo o cualquiera dependiendo de la historia, pero creo firmemente que las historias sin emoción no llegan a ningún lado. Para lograr narrar una historia tienes primero que estar conectado con ella de algún modo, si la historia es algo que yo escribo, trato de escribir acerca de cosas que tengo algo de experiencia. Si es una historia de alguien más, hay que encontrar cuál es tu vínculo con esa historia. Siempre hay alguno, solo hay que buscar profundamente hasta encontrarlo. La inspiración para mí es algo muy extraño, me llega en muy diversas formas, desde alguna frase en un libro o alguna conversación de la mesa cercana, hasta la luz que entra por alguna ventana, muchas veces no tiene nada que ver pero me hace pensar ideas, que por cierto siempre escribo enseguida porque mi memoria es malísima.
2. ¿Cuándo crees que un comercial logra ser efectivo?
Yo tengo muy claro que la publicidad tiene un propósito específico, que es comunicar un mensaje, alcanzar a una audiencia. El mensaje no lo dictamos los directores, lo dictan la agencia y el cliente que son los expertos, y como directores tenemos el compromiso de lograr que se transmita efectivamente. Los comerciales tienen como finalidad dar a conocer un producto o servicio, o intentar venderlo. Los
directores cometemos muy frecuentemente el error de querer contar una historia estéticamente increíble, con una narrativa que atrape, y muchas veces en esa busqueda se diluye el mensaje, queda una pieza hermosa de 1 minuto que no transmite a 100% el mensaje. Obviamente debe quedar impecable pero siempre fondo antes que forma. Para mí, se vuelve efectivo en el momento en que se conecta con la audiencia y muy importante, la gente recuerda el producto del que hablamos y entonces el mensaje llega.
3. ¿Cómo te ha complementado tus estudios de dirección de actores en tu trayectoria?
Mucho, para mí una de las tareas más importantes del director es elegir el casting y tienes que tener la sensibilidad para saber quién será el más adecuado para el papel, más allá de su edad y físico. Puedes reconocer a un buen actor desde el momento en que dice su nombre si tienes esa sensibilidad. Lo más importante con los actores es poder comunicarte con ellos, hablar su idioma, lograr generar un
entorno cómodo para que se sientan seguros y puedan darte su mejor performance. Yo trato de buscar verdades emocionales en ellos. Si el papel es de pareja por ejemplo, trato de que exista un acercamiento de confianza. En los ensayos a veces les pido que se cuenten un secreto. Trato de generar un lazo real aunque sea mínimo, porque eso se refleja en la escena en pequeños detalles, en miradas o gestos que surgen orgánicamente. Pasa igual con padres e hijos o con cualquier tipo de relación. Y es lo mismo con los no actores, al final todos somos seres humanos con emociones, solo hay que saber llegar a ellas. Creo que me ha ayudado mucho a tener un resultado más efectivo al contar historias. La gente se engancha con la realidad y por eso siempre busco esa realidad.
4. ¿Cuál es la visión de Mastodonte Films?
Desde el inicio de Mastodonte hemos tratado de hacer que los procesos y resultados sean fluidos y efectivos. Hemos tratado de hacer una diferencia buscando que nuestros clientes sean parte del proceso, que compartan sus necesidades e ideas con nosotros y hacerlas crecer. Siempre buscamos optimizar los recursos, no somos una compañía que quiere ganar mucho dinero en un solo proyecto, queremos hacer grandes a los proyectos porque eso nos hace grandes y nos da más proyectos, que es lo que más nos gusta hacer.
5. ¿Cuál es la diferencia entre el Samuel de publicidad y Samuel de cine?
Después de hacer mucha publicidad, la primera vez que hice una toma para cine, mi primer sorpresa fue voltear hacia atrás cuando a mí me había gustado la toma y darme cuenta que no había un cliente a quien preguntarle si estaba de acuerdo. Definitivamente la diferencia es esa libertad absoluta. Pero me importan más que las diferencias, las coincidencias. En publicidad siempre trato de hacer la historia de algún modo mia, tratar de imprimir algo de mi como se hace en el cine, no por un tema de ego sino por volverla honesta y lograr que conecte para que logre su objetivo. En el cine también pienso que las ideas deben de entenderse (sin ser obvias), pero el mensaje que quiero comunicar tiene que llegar, al igual que en la publicidad, y eso no lo hace menos artístico. A mí me gusta contar historias que toquen a la gente, y cuando eso sucede soy feliz.
Casa productora:
Mastodonte
Contacto: Isabel Echeverry
Ver video
