La
contratación de la banda ancha fija (BAF) traza una trayectoria ascendente
desde el primer trimestre de 2020 al tercer trimestre de 2022, registrándose 25,8
millones de accesos a BAF fijas al 3T-2022, esto es un crecimiento acumulado de
25,4% en su comparativo con el nivel del 1T-2020 y son 6,8% más altos que un
año atrás, dijo Ernesto Piedras, director general de The CIU.
“Las líneas
fijas pasaron de 20,8 a 23,8 millones, un crecimiento acumulado de 14,4%
durante todo el período y 4,4% más en su comparativo anual” dijo Piedras.
El IFT
evidencia una reducción en los niveles de precios de la BAF en la modalidad de
single play en sus diferentes rangos de velocidad de descarga, circunstancia
que ha propiciado una profundización en la contratación y uso de la
conectividad durante esta crisis sanitaria y económica.
En términos
reales, las reducciones del promedio de renta mensual oscilan entre 13% y 58%,
métrica que apunta que a pesar de la pujante inflación, los operadores buscan
impulsar el acceso y consumo de la conectividad, a partir de contar con planes
del servicio de la BAF a menores precios para los usuarios.
La conectividad
fija (telefonía y banda ancha fijas) registra una tendencia creciente de
adopción que se aceleró al comienzo de la pandemia de covid-19. Ello a partir
de la intensificación en el uso de la banda ancha fija para la realización de
actividades educativas, sociales, productivas, culturales, entre otras.
“Las
suscripciones al servicio no solo aumentaron, sino que los ya usuarios optaron
por aumentar sus capacidades de descarga de datos en los hogares y empresas del
país. Al mismo tiempo, los operadores de telecomunicaciones fijas han probado
la robustez en sus capacidades y soporte de transmisión de los vatos volúmenes
de tráfico de voz, datos y video que se realizan en un flujo permanente por el
uso de aplicaciones de comunicación a distancia, entretenimiento, productividad
y plataformas de contenidos. Pero también han reducido los precios de planes en
los diferentes rangos de velocidad”.
A partir de
estas condiciones es que tuvo lugar un ‘empujón digital’ en la contratación y
uso de la conectividad fija, tal que se ha registrado un impulso en el ritmo de
crecimiento de las líneas de telefonía y los accesos a la banda ancha fija, a
partir de la creciente necesidad y relevancia de contar con estos servicios en
los hogares y empresas del país.
Destacó que
en contraste, la telefonía fija registra una tendencia mezclada, al reducirse
la contabilidad de líneas en varios períodos. No obstante, en el comparativo
entre el 1T-2020 y el 3T-2022, las líneas fijas pasaron de 20,8 a 23,8
millones, un crecimiento acumulado de 14,4% durante todo el período.
Este nivel
ha sido impulsado por la oferta de servicios empaquetados de doble, triple y hasta cuádruple play por parte de los operadores cableros que generan economías
e incentivos de contratación para usuarios residenciales y empresariales.
Si bien al
3T-2022, la evolución en el crecimiento de ambos servicios (telefonía y banda
ancha fijas) se ha desacelerado, registran una contabilidad de accesos
superiores a aquellos del comienzo de la pandemia.