El hecho de que Netflix no haya alcanzado las expectativas que tenían de sumar seis millones de nuevas suscripciones en el primer trimestre del año, sumado a los bajísimos pronósticos de tan solo un millón de nuevos usuarios para el segundo trimestre del año, hizo que inversionistas salieran del gigante de streaming y buscaran otras opciones, incluso su competencia.
Las acciones de Netflix llegaron a caer hasta 10%, sin embargo, algunos que todavía creen en la compañía ya que sigue siendo la principal plataforma OTT a nivel mundial, consiguieron que el bajón después del reporte realizado el pasado martes 20 no fuera tan grave, cerrando 7,40% por debajo del cierre del mercado del día anterior.
Con un descenso de US$40,67 por acción, el valor para Netflix en la bolsa de Nueva York cerró el mercado del miércoles 21 cotizando en US$508,90.
En Wall Street hay opiniones divididas, mientras unos dicen que hay que vender porque viene un peor trimestre para la empresa, otros dicen que hay que aprovechar que está baja la acción y comprar, pues se vienen con gran inversión (44% más que en 2020) para hacer los contenidos más llamativos y atraer nuevos usuarios a partir del tercer trimestre.