Johanna Chiefo tiene 34 años y es una
de las protagonistas y productora ejecutiva de Supernova, comedia que se estrenó
a principios de julio en Prime Video en Latinoamérica y EE UU, y por televisión
abierta solo en Argentina, a través de Canal 9. Chiefo comenzó desde muy pequeña
a estudiar teatro y hasta ahora casi no había trabajado en la industria audiovisual,
salvo pequeños papeles en películas independientes.
“Justamente esa fue
la motivación para que un día, cansada de no tener oportunidades, me dispusiera
a impulsar este proyecto que hoy es Supernova” contó a PRODU.
La idea comenzó aproximadamente
en 2012 y fue a partir de un insulto gordofóbico (alguien le dijo gorda puta) y
con 22 años se sintió muy mal en ese momento, pero luego lo tomó con humor e incluso ahí nació un personaje llamado Nicolasa, más conocida como La
Gorda Puta “que era un alter ego mío y se tomaba todas las licencias que yo en
la vida no me daba. Siempre tuve mucho pudor con mi cuerpo, una relación muy
hostil con mi figura y por ello pensaba que era por eso que no me terminaban de
elegir en ningún casting. Entonces un poco por esa motivación personal y otro
poco porque el personaje fue creciendo y ganando vida propia en redes sociales, surgió la posibilidad de hacer una serie y de a poco comencé a
escribir algunas escenas sin saber nada de guion” explicó.
Luego grabó un piloto
con dinero de su propio bolsillo y más adelante ganó
un concurso del Incaa y con ese dinero mejoró un poco el piloto que llegó a manos de Javiera Balmaceda y Pablo Iacoviello, de Amazon, quienes se interesaron
por el proyecto que en un principio quisieron hacer en México, pero ella no quiso porque era su historia y su oportunidad como actriz.
Pasaron varios años
y una pandemia por medio, pero finalmente empezaron a trabajar en el proyecto de
la mano de Kapow, con Diego Ventura como productor. “Maravilloso productor que
se cargó el proyecto al hombro y lo defendió como si fuera suyo” comentó.
Luego se sumó Ana
Katz como directora y showrunner y el guionista Daniel Katz y todo comenzó a
fluir.
Cree que fue una
experiencia maravillosa y la empoderó como productora, actriz, guionista y hasta miniempresaria y no se descarta que haya una segunda temporada.
Actualmente está
haciendo un taller de guion, está trabajando en el desarrollo
de una serie de comedia a la que se sumó como productora, actriz y guionista que
analiza el lado B de la búsqueda del éxito profesional y en una película más
personal sobre el vínculo de madre e hija.
Considera que las
plataformas están rompiendo un poco los estereotipos y la gente agradece ver
caras nuevas, pero todavía falta un camino por recorrer “pero me gusta que haya más
diversidad de historias, de caras y de cuerpos” finalizó.