“Evidentemente hay una tendencia clara al feel good” aseguró Alberto Macías, director de Ficción de la productora española Mediacrest, refiriéndose a la ficción actual.
“La pandemia y la crisis aparejada al confinamiento han llevado a la conclusión de los operadores a contratar series de evasión. En cualquier caso, quiero pensar que será eventual esta ola. Las producciones que pensamos ahora son las que estarán en pantalla dentro de dos años. Más nos vale que para entonces hayamos podido superar esta crisis y las series vuelvan a ofrecernos la variedad de miradas a las que estamos acostumbrados. Y digo esto consciente de que donde me he manejado y me manejo mejor es en el feel good, pero, como espectador, también quiero sufrir un poco de vez en cuando” agregó.
Macías confiesa que quieren apostar por producciones que, más allá del entretenimiento, tengan un discurso propio, una mirada particular sobre las historias que cuentan. “No nos gustan los Frankensteins compuestos de elementos variados que podemos haber visto funcionar en otras series. Entendemos que las historias tienen un por qué, una razón para ser contadas tanto en la forma como en el fondo. No importa si se trata de una comedia, un thriller o un drama, siempre exigimos que la trama responda a un criterio, sea coherente en sus presupuestos y objetivos, tenga una voz propia, identificable, única. Queremos contar historias que nos importan, las series que nos gustaría ver”.
Frente a la interrogante de si la ficción española está en su mejor momento, responde: “Pues sí y no. Capeamos más bien que mal el confinamiento, seguimos produciendo a buen ritmo, pero, a mi parecer, tenemos un crecimiento poco equilibrado y muy dependiente”.
Para él, el aumento de demanda genera lógicamente más oferta y eso es bueno, pero, “y ahí veo yo la carencia: menos variada. Queremos conquistar Marte y al final acabamos contando lo de siempre, pero en Marte. La originalidad acaba estando únicamente en la premisa. Luego en el desarrollo acabamos repitiendo la misma fórmula, vaya usted a saber si por incapacidad, juventud o requerimiento del cliente. Nos falta profundizar en las historias, explorar las posibilidades que nos ofrecen, aguijonear a nuestros personajes para que, como decía Carrière, nos conduzcan a situaciones inesperadas e inevitables”.
Confirma que los costos en los presupuestos de ficción se han incrementado debido al covid. “Una grabación segura tiene sus costes. Y si no los pagas en prevención, los pagas después en suspensiones de rodaje. A veces, en los dos”.