Desde adentro es una serie colombiana
dirigida por Óscar Jiménez y coescrita por Alejandro Matallana Posada y Sandra
Higuita. El pasado 14 de septiembre fue estrenada en la plataforma de streaming gratuita Riivi y actualmente
se encuentra disponible para los espectadores de Chile, Perú, México y Colombia.
Esta historia
(protagonizada por Quique Mendoza y Marisol Correa),
sigue el mundo de Víctor, un arquitecto de 40 años que vive atrincherado en su
apartamento debido a su agorafobia (miedo a estar en espacios abiertos). A
través de los ventanales, sueña con el mundo exterior, mientras lucha en
solitario contra la adversidad. Pero cuando su hija Celeste y una mujer llamada
Flor (que sufre de claustrofobia), entran en su vida, Víctor se embarca en una
odisea emocional para superar su miedo y construir un nuevo comienzo.
Matallana
contó que “esta idea surgió en
2020, en plena pandemia. Queríamos hablar de la situación, pero no de la
pandemia como tal. Entonces pensamos en situaciones parecidas y de ahí me surge
la idea de contar esta historia de un hombre con agorafobia. Luego, el director
Óscar Jiménez incluyó este personaje de una mujer con claustrofobia. A partir
de ahí empezamos a contar cómo entre los dos personajes surge el amor y cómo se
ayudan a enfrentar sus temores”. En ese sentido desveló que la escritura del
guion tomó cuatro meses.
Por otro lado, comentó que la serie fue creada
con el propósito de concursar en la convocatoria Abre Cámara, organizada por el
Ministerio de Tecnologías de la Información y Comunicaciones de Colombia
(MinTic). “Participamos con esta serie y ganamos el premio, un estímulo de
producción de aproximadamente 600 millones de pesos (US$140 mil) y así fue
como la pudimos desarrollar”.
En esa línea, el escritor recalcó que la
financiación del proyecto provino exclusivamente de dicho incentivo económico. “La convocatoria
Abre Cámara nos motivó a escribir esta serie. Si no hubiera existido ese estímulo,
probablemente ni se nos hubiera ocurrido la idea” enfatizó.
En cuanto al rodaje, dijo que duró cuatro
semanas y que se llevó a cabo en el barrio Chapinero Alto (al nororiente de Bogotá).
Aseguró que se escogió esta zona con el fin de mostrar una cara más “moderna,
limpia y bonita” de la ciudad.
Del mismo modo, resaltó que durante la
realización hubo que enfrentar múltiples retos debido a la pandemia de
covid-19: “Surgieron costos que antes no teníamos, los enfermeros, las pruebas
PCR. En las vans que transportaban el
talento artístico solo podían ir cuatro personas por el tema de
distanciamiento, eso fue lo más difícil”.
Aun así, afirmó que, a pesar de esos
obstáculos, las grabaciones se desarrollaron sin mayores inconvenientes: “Realmente
todo fluyó, creo que el hecho de que hubiéramos escrito esta historia pensando
en la producción y en esas limitaciones contribuyó para que las cosas salieran.
Toda la planeación se hizo muy bien y eso también ayudó” concluyó el artista.