(Omar Méndez, Cartagena). La difícil convivencia de cableoperadores legales con otros informales, la cultura de la piratería que predomina en gran parte de la región andina y América Central, y limitantes estructurales que sufren algunos países, fueron expuestas descarnadamente el lunes en el debate central de apertura de Andina Link 2002. Operadores de cable de República Dominicana, Costa Rica, Honduras, Ecuador, Guatemala, y Colombia mostraron que tienen muchas dificultades comunes, especialmente en su relación con los programadores. Otto Zea, representante de la gremial de operadores de cable de Guatemala mostró los inconvenientes que tiene el desarrollo del negocio en una nación con 11 millones de habitantes, el 75% en extrema pobreza, un 22% de pobres y sólo el 3% de pudientes. “Junto a esos problemas, el país tiene cuatro leyes sobre el cable que no lo benefician. Tenemos 350 empresas operadoras, de las cuales 200 son piratas. Las que estaban legales ya no pueden mantener esa condición porque las leyes favorecen la corrupción. ¿Qué negociación se puede entablar en esa situación?”, se preguntó, haciendo referencia a la natural insistencia de las empresas de programación de acabar con la piratería de señales. Randal Porras, de Costa Rica; Carlos Correa Kalaf, de República Dominicana; Diego Guzmán de Ecuador; Jaime Alberto Rincón, de Colombia; y Max Baires, de Honduras, coincidieron también en que operadores y programadores deben abrir un diálogo para hacer viable lo que para ellos es ideal: pagar a cada programador lo que el sistema realmente puede. “Hay que enfrentar los problemas aliándose”, propusieron casi al unísono desde el panel, en medio del aplauso cerrado de una sala de conferencias completamente llena. La propuesta no apunta sólo a la relación con los programadores. También pretende buscar soluciones para los altos costos de posteados en casi todos esos territorios, la falta de políticas oficiales que apoyen sus actividades, la necesidad de enfrentar la piratería intestina, los inconvenientes que les crea DIRECTV, y la búsqueda de financiamientos privados reales para sus operaciones. Como ocurre cada año, Andina Link aparece nuevamente como un ámbito que convoca a uniones. Este día inaugural dejó en pie una propuesta para formar un frente común de cableoperadores de los países con mayores dificultades económicas.