Almudena Vázquez fue de esas guionistas que en marzo creyó que no pasaba nada por trabajar en casa como estaba acostumbrada. “Nada más lejos de la realidad” confiesa.
“De hecho, esa soledad es lo que menos me gusta de escribir, es obvio que es necesaria por el propio trabajo en sí mismo y el nivel de concentración que requiere, pero la soledad prolongada acaba afectando tu estado de ánimo”.
Para Vázquez, que ha trabajado como guionista en series de televisión como Tierra de lobos, Derecho a soñar o Centro médico y recientemente formó parte del equipo de Mercado central de TVE, tener que ser creativa en esa dura realidad, “con una incertidumbre total y en un estado de alerta constante es complicadísimo”.
Le resultaba imposible concentrarse. “Cuando por fin pudimos recuperar las reuniones semanales del equipo de guion fue como un soplo de aire fresco, sentí que necesitaba hablar con mis compañeros e intercambiar impresiones”.
Agregó que cuando pudieron retomar el rodaje hubo que adaptar los guiones a los protocolos. “Los actores debían mantener las distancias, no podían tocarse, besarse ni abrazarse… algo que se mantendrá hasta que esta situación se solucione. Y esto, obviamente, afecta los guiones, por lo que todo el equipo tuvimos que buscar soluciones para adaptar las tramas, y en algunos casos, como las historias románticas, ha resultado todo un reto”.