El 2019 promete la incorporación de tres fuertes jugadores
que, de aparecer efectivamente, alterarán el escenario de entretenimiento
digital. Se trata de Disney, Warner y Apple, que estarán lanzando cada uno su
propia OTT.
En la región ya suman más de 270 plataformas digitales que dejaron
de ser una novedad para convertirse en una alternativa para ver series y
películas disponibles en 8 de cada 10 hogares conectados a Internet.
De acuerdo con un análisis de Bussiness Bureau, los retos que
tienen las OTT son mejorar la experiencia del usuario con una carga rápida de
contenidos y un diseño responsive,
que funcione correctamente en todos los dispositivos; proveer contenidos
diferenciados, originales y un catálogo dinámico; y, finalmente, encontrar el
modo de capitalizar los contenidos según las necesidades de los usuarios. Este último punto será clave para que el negocio pueda subsistir, pues “los usuarios
se encuentran limitados con el tiempo del que disponen a la hora de ver contenidos
y también al momento de pagar por estos”.
“La convivencia de distintas plataformas van borrando los
límites entre lo lineal y lo no lineal. Todos compiten contra todos. Los
grandes se volverán más grandes y los chicos, más chicos. La industria seguirá
creciendo gracias a la generación de nuevas experiencias que cautiven la
atención de los usuarios” señaló Tomás Gennari, VP ejecutivo de BB.