"El marketing y la publicidad del cine norteamericano va en detrimento del nuestro", aseguró Mercedes Sampietro, presidenta de la Academia de Cine
(Mari Cruz Cantalapiedra, Madrid). Estabilidad en la producción y disminución en el número de espectadores. Este es el balance del año 2004 para la industria cinematográfica española.Mientras que la cantidad de espectadores que fue a ver películas españolas bajó de 21,7 millones en el 2003 a 18,7 en el 2004, la cifra de los que optaron por cine norteamericano creció de 115,7 millones en el 2003 a 121,7 millones en el 2004, según datos estimativos (registrados hasta el 20 de diciembre por el Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales).De esta forma, la recaudación de las películas españolas pasó de casi €101 millones (casi US$131 millones) en el 2003 a poco más de €90 millones (unos US$116,7 millones) el año pasado. El cine estadounidense, por su parte, recaudó €115,7 millones (cerca de US$150 millones) en el 2003 y €121,5 millones (aproximadamente US$157,5 millones) en el 2004.”Aunque el número de espectadores que se ha acercado a las salas de cine ha crecido, desgraciadamente la cuota de cine español desciende en relación a 2003 en más de dos puntos, que gana la cinematografía estadounidense”, explicó José Antonio Félez, productor de la compañía Tesela. Así, la cuota no llega al 14%, frente al 69% que consigue el cine hecho en EE UU. La distribución, dominada por los títulos de las majors, sigue siendo el caballo de batalla de los profesionales del cine español.”El marketing y la publicidad del cine norteamericano va en detrimento del nuestro. No creo que sus películas sean mejores que las nuestras, pero están en todas las salas. Y la gente las ve. Por esto es por lo que hay que luchar”, aseguró Mercedes Sampietro, presidenta de la Academia de Cine.Por su parte, el informe anual de la Academia Española de Cinematografía revela que en 2004 la cifra total de producción se ha mantenido prácticamente igual que en 2003, con 125 producciones (39 de ellas coproducciones internacionales), de las cuales se han estrenado 72; 14 más que en el año precedente.El costo medio de una película española en el 2004 ha sido de €2,1 millones (unos US$2,7 millones); el rodaje ha sido de 9 semanas y el equipo ha promediado unas 58 personas. El resultado final es un largometraje de 99,7 minutos que se distribuye con 68 copias.El informe también ha destacado el auge en la producción de documentales con 26 títulos, de los cuales 5 corresponden a películas colectivas (con varios directores).
