En el marco de la FILBO, Feria Internacional del Libro de Bogotá, se lanzó el libro Cinematografía en Colombia, tras las huellas de una industria. El evento tuvo como invitados a Gonzalo Castellanos, autor del libro, y a Claudia Triana, directora de Proimágenes.
Castellanos fue productor de largometrajes colombianos como La sangre y la lluvia, La sociedad del semáforo y En coma. Además, ha promovido políticas y proyectos culturales en buena parte de los países del continente, por lo que es una voz autorizada en el tema. El escritor afirma que hay un contraste entre la proliferación de la realización de cine en Colombia versus la cantidad de personas que van a las salas.
De acuerdo con un estudio de Proimágenes, 2022 es el año con el mayor número de largometrajes colombianos estrenados en salas de cine: 54. En contraparte, ese año alrededor de 37,7 millones de personas asistieron a las salas de cine, cuarto número más bajo obtenido desde el 2010. Asimismo, de esa cifra solo 1,25 millones de espectadores fueron a ver películas colombianas, el 3,31% del total registrado.
“Hay salas de cine en menos de 52 municipios. El asunto de la taquilla es que quizás no se logra, no crece de la misma manera como antes, por un asunto económico, muchas personas no cuentan con recursos suficientes” comentó Castellanos.
En medio de este panorama, se destaca el trabajo de Proimágenes, que ha logrado que en sus 25 años de existencia haya crecido en gran número la realización de cine en Colombia. “En este período se han hecho más de 565 cortos que se han presentado en salas de cine y más de 485 películas que se identifican con las situaciones cotidianas de las audiencias. A los proyectos de la industria se ha dado al sector más de 600 mil millones de pesos, es decir, US$132.877.500” señaló Claudia Triana.
La directora de Proimágenes concuerda con Castellanos en que uno de los principales retos es lograr que los colombianos se acerquen más a las salas de cine y en especial a ver las películas colombianas, aunque las cifras de asistencia sean mejores que 25 años atrás.
Una propuesta del autor de Cinematografía en Colombia, tras las huellas de una industria para que más personas asistan a las salas se enfoca en la población joven, “que no están en edad laboral y no tienen recursos económicos. Hay que empezar a trabajar en la construcción de políticas que buscan respuestas y alternativas para beneficiarlos a través de un subsidio”.
Por su parte, Triana añadió que Proimágenes Colombia continuará ajustándose a las necesidades del audiovisual, siendo una plataforma fundamental y una mesa de diálogo que “contribuye a fomentar la industria como motor de desarrollo de este país”.