El gasto publicitario en la televisión abierta (excluidos los anuncios políticos) se redujo en US$34 mil millones en todo el mundo el año pasado, cuando la pandemia paralizó la producción y las marcas movieron dinero a las plataformas streaming, según datos de WARC.
La publicidad se volcó hacia los servicios de video a pedido (AVOD) financiados por anunciantes, incluidas plataformas como Hulu, Peacock y YouTube, que vieron aumentar la inversión de marca en un 9,9% hasta un total de US$26.700 millones. Se estima que el mercado de AVOD se duplicará a un valor de US$54 mil millones para 2025, según proyecciones de Digital TV Research.
En EE UU, la inversión publicitaria en plataformas AVOD se triplicará durante los próximos cinco años, a un total de US$24,2 mil millones, con China aumentando a US$9,2 mil millones, Japón a US$3,2 mil millones y el Reino Unido a US$2,8 mil millones.
2020 fue un momento decisivo para la transmisión de video a medida que erosiona la visualización lineal. La tendencia refleja la evolución de los hábitos de visualización de los consumidores: uno de cada cuatro pasa más tiempo con contenido de video transmitido a expensas de la televisión lineal en EE UU (26%) y el Reino Unido (27%), según la encuesta de AudienceProject, mientras que uno de cada tres estadounidenses ahora solo hacen streaming de contenido de video.