Mónica Lozano, presidenta de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas (Amacc) y CEO de la productora Alebrije, comentó que mantienen conversaciones con la secretaría de Cultura y el Imcine, entidad para el apoyo del cine mexicano, con el fin de buscar soluciones a la situación de los trabajadores, productoras y empresas de la industria.
“Es importante que el gobierno entienda la precariedad con la que trabaja el mundo de la cultura y los creadores, así como las pequeñas empresas. Es urgente que se diseñe algún programa emergente, para lo cual estamos dispuestos a colaborar” dijo.
Entre los posibles programas se evalúan: convocatorias, algún esquema de retribución social postergado o el apoyo directo.
Explicó que el reto que se viene es la construcción de un censo, pues las autoridades les han pedido información del número de empresas y la situación en la que se encuentran. “Más allá de los datos que existen en la Comisión de Filmaciones de la Ciudad de México, no hay datos globales. Lozano comentó que habría que especificar qué tipo de pymes son las empresas y cuántos trabajadores tienen, además de saber cuánto tiempo pueden permanecer sin operar, sin que se vean obligadas a cerrar”.
“Hay que pensar en las personas que trabajan en la industria, que mayoritariamente son freelancers, que ni tienen seguridad social. Personas que cobran por día de trabajo o por semana, muchos padres de familia o madres solteras, o personas con edades de más de 60 años” dijo.