Por segunda semana consecutiva Hasta que la plata nos separe, de RCN, lidera el listado mundial de Netflix de series de habla no inglesa más vistas con cerca de 52 millones de horas. “Yo le había dicho a Carmen Villalobos (protagonista de la producción) que en las plataformas le iba ir muy bien, pero no me imaginaba que tanto” comenta Israel Sánchez, uno de los directores de la serie colombiana.
Sánchez asegura que el fenómeno ha sido tanto en Netflix que continuamente “la gente está pidiendo segunda temporada. No sé si la vaya a haber, me imagino que lo estarán estudiando. Creo yo que es difícil, pero se podría dar. A veces cometemos errores porque el público lo pide y hacemos segundas temporadas. La historia se cerró muy bien, pero si hay que hacer segunda temporada, la hacemos sin problema”.
Para este director que también ha estado detrás de producciones como Lady, la vendedora de rosas, Pa’ quererte, entre otras, con esta nueva versión de Hasta que la plata nos separe lograron una universalidad tanto desde la historia como desde lo audiovisual, por lo que lograron conectar con más personas.
“El contenido es lo importante más que la producción en sí. Qué dice la historia, para quién lo cuentas y cómo se la cuentas. Yo creo que Hasta que la plata nos separe tiene muchas emociones, humor negro, se ve lo popular y la lucha de clases desde ese mismo humor negro. Es fácil identificarse. En Latinoamérica el común denominador es la lucha y las ganas de salir adelante y eso lo tiene Hasta que la plata nos separe” analiza Sánchez.
Para esta versión de la original creada por Fernando Gaitán, el colombiano sostiene que fueron claves que a la protagonista le bajaron un poco su clase social e intensificaron la historia de amor: “Mostramos cosas que les pueden pasar a los televidentes de muchas partes. Cuando la tragedia se trata con humor yo creo que se hace más agradable y esto ante todo es una comedia romántica”.