El recorte de publicidad ha afectado notoriamente a la industria del entretenimiento y a los medios, como una consecuencia más del coronavirus.
La nueva normalidad pasa por revisar ese dilema de recortar el gasto ante una previsible caída del consumo, señalaron durante un webinar Andy Brown, CEO y Chairman de la División Media de Kantar, y Jane Ostler, Global Head of Media de la División Insights de Kantar.
En las últimas semanas en las que medio mundo ha estado confinado, las tendencias en visionado sugieren nuevos aspectos a explorar. Por ejemplo, el público masculino comenzó a ver morning shows y los brasileños al quedarse sin partidos de fútbol dieron una sintonía inusual a la repetición de la final de la Copa Mundial de 2002 que ganó ese país.
La audiencia de la TV experimenta un crecimiento exponencial con picos como el de Perú con 55%. Pese a esto, se espera un recorte de 23% de la publicidad global.
Los ejecutivos destacaron que solo 8% de los consumidores cree que las empresas deben dejar de anunciar. Y frente a eso la consultora ofrece un dato revelador: “Las marcas más fuertes se recuperaron nueve veces más rápido de la crisis financiera de 2008”. Pero advierten que los mensajes deben cambiar: no se debe explotar el coronavirus para promocionarse. “Es el momento para que la publicidad sea útil, positiva y consistente con valores”.
Detener la publicidad en TV por seis meses, señalan, podría reducir indicadores como TBCA, menciones totales y compras inmediatas.