Lucy Luna, escritora mexicana radicada en Los Ángeles, cuenta que la vida le cambió con su guion Sophie & Valentina, con el cual ganó la fellowship de HBO y ScreenCraft, así como le permitió formar parte de la lista anual de Hollywood Young & Hungry. Desde ese momento no ha parado de desarrollar películas y series, trabajando con las más relevantes compañías productoras del mercado anglo, siempre imprimiendo su sello latino.
“El mercado por fin se está abriendo. En mis dos shows tengo a protagonistas mexicanas y aunque se desarrolla en EE UU, lo que quiero aportar es que cuando veamos a mexicanos en películas y series, sean más que narcos u obreros. Que haya personajes mexicanos trae orgánicamente a la cultura, sin necesidad de recurrir a estereotipos” afirmó.
Luna, de 32 años, logró que su primer cortometraje de terror, We’re all here, ganara seis premios en festivales internacionales. También acaba de terminar de escribir una película de terror para Sony, colaboró con el show de televisión Two sentence horror stories para CW (también en Netflix y HBO Max), y actualmente escribe para la serie All rise, que cambió de canal, moviéndose de CBS a OWN (Oprah Winfrey Network).
La escritora igualmente se encuentra desarrollando proyectos para terceros, como uno para la actriz Sydney Sweeney y otro para Taboo, el cantante y compositor integrante de Black Eyed Peas, cuyos detalles serán anunciados más adelante. Pero, además, tiene proyectos propios como Tales of a scalpel (Memorias de un bisturí), que sigue la historia de una médico forense (inspirada en su madre) y todas las situaciones que surgen en este contexto, y que ya vendió a CBS Studios.
Por otro lado, desarrolla Leona, el piloto que escribió con la fellowship de HBO y que va a ser producido por Pride of Gypsies (la compañía de Jason Momoa) y protagonizada por Stephanie Sigman.
Luna se formó en la New York Film Academy, en el campus de Los Ángeles. Cuenta que en 2014, cuando se fue a estudiar a Los Ángeles, las instituciones relacionadas con el medio audiovisual en México estaban más enfocadas en dirección y producción, pero no en guion. Sin embargo, en su natal Morelia, Michoacán, se inspiró para ir por su sueño: “El festival de cine de Morelia fue mi mayor escuela e influencia. Cuando vas al cine, solo te llega lo comercial, pero allí yo tuve la oportunidad de ver todas esas películas a las que no iba a acceder de otra manera. ¡Por algo es el favorito de Tarantino!”.