Folks VFX es un estudio de efectos visuales
creado originalmente en Canadá y que actualmente tiene presencia en diferentes
partes del mundo. En 2019, esta organización abrió su oficina en Colombia con
el fin de aprovechar el potencial del talento local. Nicholas Seal,
quien se desempeña como senior VFX
supervisor, habló acerca de lo que ha significado la llegada de esta
empresa al país y el aporte que ha tenido para la industria audiovisual.
“Por lo general trabajamos en películas y series de
televisión. En productos que tienen efectos visuales grabados en imagen real y
a veces en animación 3D también” comentó Seal. Del mismo modo, remarcó que Folks
Bogotá ha colaborado en series “de alta gama” como The
morning show (de Apple TV+), Mil
colmillos (de HBO Max), 1883 (de Amazon Prime) e Historia de un crimen: Colmenares (de Netflix). “Yo siento que hemos crecido mucho en los
últimos dos o tres años, ya estamos muy acostumbrados a manejar clientes directos
y trabajar con proyectos de Norteamérica” aseguró.
El supervisor contó que la creación de la
sucursal colombiana surgió como resultado de “la
relación que nuestra head of studio, Andrea
Espinal, formó trabajando con la gente de Folks en Canadá; detrás de este
acercamiento nació esta oficina”. Del mismo modo, recalcó que “hay muchas cosas
fuertes acá. Somos una oficina colombiana basada en talento colombiano, talento
creativo, talento técnico respaldado por la experiencia de una empresa global”.
En esa línea, recordó que Folks VFX cuenta
con presencia en otras ciudades como Montreal, Toronto, Quebec, Shanghái y Mumbai.
Asimismo, aseveró que la compañía forma parte de Pitch Black, un reputado
conglomerado empresarial que reúne a 14 estudios. En opinión de Seal, el roce
internacional “nos ha dado mucho más bagaje y músculo que antes. Nos ha dado esa
confianza con las otras oficinas. Nos ha ayudado a romper barreras y prejuicios
para tener acceso a clientes de Norteamérica que normalmente uno no tendría
necesariamente aquí en Colombia”.
Por otro lado, resaltó que, entre los desafíos
principales que ha debido afrontar su equipo está el hecho de trabajar con los
mismos estándares y exigencias de calidad que las industrias extranjeras. “Tal
vez la serie 1923 (secuela de 1883) trajo los retos más grandes que
hemos hecho por la cantidad de planos. El cronograma tuvo muy poquito tiempo,
tres o cuatro meses. Trabajamos haciendo criaturas animales de la selva en
África” desveló.
Para finalizar, reconoció que para Folks Bogotá no ha
sido una tarea sencilla hacerse un lugar en el sector: “Al principio
trabajábamos con las oficinas de afuera, pero no directamente con los clientes.
Sería una mentira decir que no hay prejuicios y uno tiene que pasar esto. Pero
hoy en día siento que la oficina de Bogotá es respetada en la industria por sus
propios méritos y puede manejar clientes y trabajos grandes. Hemos ganado mucha
fama y buena reputación, eso es algo muy lindo y no es muy fácil de lograr. El
apoyo de nuestros socios fue clave” concluyó.