Laura Acuña lleva más de 15 años en los medios de comunicación de Colombia como presentadora de distintos programas de televisión y radio como matutinos, concursos, deportes, variedades, entre otros. Sin embargo, nunca había actuado. Lo más cercano fue cuando parte de su cuerpo, simulando un cadáver, salió en un episodio de la serie Tiempo final.
Pese a esto, el reconocido escritor Dago García vio en esta mujer nacida en Bucaramanga (nororiente de Colombia) a la protagonista de su película El último hombre sobre la Tierra, que se estrenó en ese país el pasado 22 de diciembre y se mantiene en los primeros lugares del box office.
Aunque muchos dirían que sí de inmediato, Acuña lo dudó cuando Dago le hizo propuesta de estelarizar una cinta: “Le dije ‘hazme una prueba, por favor, porque yo no sé ni siquiera cómo hago esto. Nunca he actuado’. Me respondió ‘yo no la necesito, pero listo’. Después de hacer la prueba me dijo ‘Si antes no tenía dudas, ahora menos’, así que dime que sí, por favor, y efectivamente le dije que sí”.
En la actualidad confirma que no se arrepiente ni por un segundo de su debut en la actuación y en el cine. “La demora en tomar la decisión era que nunca me lo esperé. Fue un shock al principio, pero fue la mejor decisión. Uno siempre tiene que estar abierto a las posibilidades y creo que la clave es aprovecharlas. Me gustó todo, es un mundo realmente apasionante. Hacer cine tiene una mística que a uno le queda gustando” sostiene Laura, quien no descarta participar en proyectos actorales a futuro.
En El último hombre sobre la Tierra Laura Acuña interpreta a Liliana, una alta ejecutiva que lo tiene todo, menos el amor y en medio de esa búsqueda termina con la persona que menos se lo esperaba: Piquiña (John Alex Toro), su compañero de trabajo, un charlatán no tan apuesto, pero muy divertido y de gran corazón.
La bumanguesa asegura que se le facilitó el personaje porque tiene varias cosas parecidas a ella: “Amamos nuestro trabajo, es superdisciplinada, organizada, le gusta controlar todo en su vida. También en la perseverancia que tiene de querer encontrar lo que quiere en su vida”.
Asimismo, destaca el trabajo colaborativo que tuvo con el director Juan Camilo Pinzón y su coprotagonista John Alex Toro. “La premisa siempre fue: ‘si te diviertes todo sale bien’ y así fue gracias a mis compañeros. Al principio le decía a John Alex ‘qué pena contigo, tú el más profesional, el que más experiencia tiene y yo ahí recién llegada, la nueva del salón más o menos. Y él se encargó primero de que disfrutara tanto en las grabaciones como fuera de ellas. También me ayudó en temas que eran más complicados y necesitaban técnica actoral. En gran parte lo que se ve en la película es gracias a Juan Camilo y a John” concluye Acuña.