Made In Spanish continúa haciendo ajustes en su flujo de trabajo para garantizar la salud de sus trabajadores y sus familias en sus estudios en México. Pasados tres meses cuentan cómo ha sido la adaptación a la nueva normalidad.
“Tuvimos que cambiar el modelo y los procesos de producción prácticamente de la noche a la mañana. Afortunadamente, contamos con un gran equipo y salimos adelante” comenta Denice Cobayassi, CEO de Made In Spanish.
Parte de los cambios tienen que ver con la preproducción de los proyectos, grabación a distancia y las comunicaciones. “El proceso de preproducción se trasladó por completo a la nube. Implementamos un sistema en el cual todos estamos conectados”. Reconoce que la adaptación fue complicada, “pero el que no se adapta, muere, nosotros lo hicimos y nos hemos dado cuenta de que con esto, incluso estamos más comunicados”.
Actualmente han reanudado la grabación en estudio. “Seguimos el modelo 1/1. Se trabaja un día y se deja descansar las instalaciones otro día completo, en el cual se sanitizan todas las salas y lugares donde la gente está. La mayoría de nuestro personal sigue haciendo home office y con eso nos aseguramos de que haya el menor contacto posible”.
Los que están en los estudios, nunca más de tres personas, utilizan tapabocas, caretas y guantes para trabajar. “Todo son sanitizados en la entrada y nos hemos hecho a la usanza oriental, nos quitamos los zapatos y los dejamos en la entrada, para trabajar en pantuflas, mucho más cómodos”.